El día 25 de marzo del año en curso, nos enfilamos en la caminata que los líderes de la comuna 10 de la ciudad de Neiva realizaron por las diferentes fuentes hídricas que nacen y recorren a la estrella fluvial de la ciudad. La comuna 10.


Por: Germán Osorio Arias
Lucas Mateo Vargas Vargas.

La travesía se inició en el asentamiento Álvaro Uribe Vélez, en donde nace la fuente hídrica denominada ‘Las Moyas’. Pero por éste también recorren las aguas negras que drenan de la calle 19 del barrio Las Palmas, sector carente del servicio de alcantarillado, las cuales contaminan la fuente en mención.
El asentamiento Álvaro Uribe Vélez, zona invadida en el año 2004 y que alberga a más de 400 familias entre desterradas por el conflicto armado y familias receptoras en condición de vulnerabilidad económica, es un sector de gran significado por la biodiversidad que lo caracteriza. Dentro de este entorno de importancia ambiental, encontramos una zona de humedales y de vegetación como: pasto Curíbano, Berro, Pata de Vaca, Buchón de Agua, Helecho, Palmicha y árboles como: Cachimbo, Yarumo, Cují, el Igua, Nacedero y Ceibo, toda esta vegetación propia de zonas húmedas.
El agua de ‘Las Moyas’, antes de encontrarse con la quebrada La Jabonera, afluente amenazado por la construcción del condominio Hacienda Mayor de la constructora Vargas, recorre la parte baja del asentamiento en cuyo camino recibe aguas negras, desechos sólidos y está expuesta a la tala de la vegetación de su ecosistema natural.

Durante el recorrido llegamos a una pared de humedales que alimenta a Las Moyas y a la quebrada La Jabonera, la cual no aparece entre los ecosistemas estratégicos del Huila reconocidos por estudiosos ambientales. Al llegar a La Jabonera encontramos una familia proveyéndose de agua para bañarse y lavar la ropa. Allí hicimos una breve estancia para refrescarnos a la sombra del Cachimbo y disfrutar de la brisa fresca que ofrece la vegetación y la misma quebrada. Después nos encontramos con la desembocadura donde Las Moyas le entregan las aguas ya contaminadas a la quebrada La Jabonera, afectando a dicho afluente el cual desemboca en el río las Ceibas, pero que en su recorrido recibe aguas negras de los barrios: Las Palmas, La Victoria, Calle Real, Neivayá y Palmitas Dos. Esta fuente tiene basura en su alrededor como botellas plásticas, vidrio, bolsas y despojos de animales.
Siguiendo el recorrido de la quebrada La Jabonera, nos encontramos con su desembocadura en el río Las Ceibas a la altura de Palmitas Dos. El río Las Ceibas, en ese día, se encontraba turbio, pues estábamos en tiempos de invierno y había llovido en su cabecera. Este río es un afluente de suma importancia para la ciudad de Neiva, pues de éste se alimenta el acueducto de la ciudad.
Dado que la travesía se hizo para verificar el estado de la parte baja del río Las Ceibas comprendido en la comuna diez, seguimos el recorrido de éste hasta el barrio El Oasis, límite fronterizo entre la comuna 10 y la comuna 5 por la orilla del río Las Ceibas.
A lo largo del recorrido encontramos que en el barrio Palmas 2 existe un pozo colector de las aguas negras del alcantarillado del sector, el cual, por falta de mantenimiento por parte de la Empresa Pública del municipio, se encuentra rebosado y afecta de manera directa a la quebrada que nace en la carrera 59 del barrio Las Palmas y que deposita sus aguas, contaminadas por el alcantarillado en mención, al río Las Ceibas.
Para conocer la desembocadura de la quebrada la 59 y el pozo, nos adentramos bajando hasta la orilla del río. Nos acompañaron 6 personas entre ediles y presidentes de juntas, mientras el resto del grupo se quedó en la parte de arriba junto con los agentes de policía que nos acompañaron a regañadientes.
Mientras nos encontrábamos a orillas del río, nos topamos de frente con un individuo de aspecto pernicioso y de dudosa procedencia que miró las cámaras con brillo en sus ojos. Cuando él vio que había 7 personas siguió su recorrido sin atreverse a nada.
Subimos y nos reunimos de nuevo con todo el grupo y en casa de doña Denis, presidenta de la JAC del barrio Mira Flores, consumimos agua y comimos algunas guayabas de los árboles que se encuentran en su patio.
A lo largo del recorrido nos acompañaron un perro, que se unió desde el barrio Las Palmas donde nos pusimos la cita, y un gato, el cual siguió al grupo desde el barrio La Victoria.
Entre el barrio Mira Flores y el barrio Palmas Tres, en la carrera 58, encontramos una quebrada que nace en la parte del barrio Las Palmas y que en el sector de la Media Luna le entrega sus aguas a las Ceibas. A orillas de dicha quebrada se encuentra la casa construida en madera y láminas de zinc de doña Migdalia Pérez González, una anciana de 74 años de edad, con su piel surcada por los años y sus cabellos plateados que, en condiciones paupérrimas e insalubres, habita allí desde hace 5 años. “Yo pido a la administración municipal que me reubiquen, así sea para vivir mis últimos días. Yo aquí vivo muy enferma, los médicos dicen que tengo principios de neumonía, claro es que vivo en este sitio expuesta a la humedad, al chorro de agua de la quebrada”, comenta la anciana, con voz acongojada, mientras le ayudaba a su hija a preparar la ensalada para la cena.











Llegando al barrio Palmas Tres nos encontramos con la casa de doña María Olga Hernández, una señora que, de sus 65 años de vida, lleva 18 habitando el sector. Es proveniente del departamento de Antioquia y llegó al Huila en los años 80’s, según ella “por las ganas de hablar”. Su casa construida en diversos materiales tales como: Bahareque, tabla, tejas de zinc y costales de fibra, se encuentra en peligro de caerse, dado a una grieta producida por el invierno, que por ese tiempo azotaba a la ciudad. Doña María Olga, que mientras hablaba de sus hijos, se vino en llanto al recordar que sus dos hijos se encuentran lejos, pues uno vive en Bogotá y otro en San Vicente del Caguán y ella se encuentra sola en Neiva.
Entre el barrio Palmas Tres y el Sector Barreiro, cruza la quebrada La 57, la cual se encuentra en alto grado de contaminación, pues ella recibe las aguas negras procedentes de los barrios Las Palmas, Sector Barreiro y Palmas Tres. La quebrada que desemboca en el río Las Ceibas a la altura de la carrera 57, también es afectada por los desechos sólidos que los habitantes del sector arrojan de forma irresponsable.
Con el grupo agotado por la caminata, dado al factor climático de humedad y sol, llegamos a Las Camelias, uno de los 16 barrios que conforman el sector de la Media Luna. En éste nos encontramos con la quebrada Del Bollo, a la cual le llegan las aguas negras de los barrios San Bernardo del Viento y de la parte del barrio Las Camelias que aún no cuenta con el servicio de alcantarillado. En el mismo sector encontramos que un pozo del alcantarillado, ubicado detrás de la escuela, está rebosado por falta de mantenimiento. Aunque los alcantarillados del sector de la Media Luna cumplan su función en buenas condiciones, por falta de la construcción del Colector Mayor, los residuos caen de forma directa al río Las Ceibas. De manera paradójica, el pozo del alcantarillado del barrio Las Camelias que se encuentra rebosado, está ubicado cerca al pozo número 1 de la sexta fase del colector mayor, la cual se construyó por medio de una acción popular, pero que aún le falta construir 3 fases más para concluir dicha obra.
Ya siendo las 7:00 de la noche decidimos concluir el recorrido que habíamos iniciado desde las dos de la tarde con los líderes de la comuna, quedando por visitar las últimas cuatro quebradas del sector que, igualmente contaminadas, terminan su recorrido en el río Las Ceibas.
A las 9:30 de la mañana cumplimos la cita acordada la noche anterior con la señora Ofid Bonilla, presidente de ediles de la comuna 10 y Estella Sotto, presidente de la JAC del barrio San Bernardo, para continuar con el recorrido y conocer el estado de las fuentes restantes.
Sin policías y un grupo reducido, ya no de 16 sino de 4 personas, iniciamos el recorrido en el barrio San Bernardo, pues en éste nace una quebrada conocida como ‘La Curva’ que antes de desembocar en Las Ceibas se alimenta del alcantarillado del barrio.
En el sitio de la desembocadura de la quebrada encontramos que, aproximadamente 50 metros antes, el alcantarillado del barrio Las Camelias deposita las pútridas aguas recogidas en esta cloaca.
En esta ocasión, las aguas de Las Ceibas se hallaban con un menor grado de turbiedad. Era visible el contraste entre el color negro de las aguas de las cloacas y el café claro del río.
Con el temor de ser atracados continuamos con nuestra caminata y llegamos al barrio Granjas de San Bernardo en donde encontramos varias marraneras, pues es común que en esta zona se practique la porcicultura.
Un hedor putrefacto nos condujo a la desembocadura del alcantarillado de los barrios: Enrique Olaya Herrera, La Amistad, Los Machines y San Bernardo, que según versiones de doña Estella Sotto, por medio de una acción popular, ganaron ante la administración municipal el desvío de las aguas negras que recorrían las calles. Para dar cumplimiento a la acción interpuesta por la comunidad, la administración municipal solicitó a la CAM, le dejara conducir estos alcantarillados y verter el agua en el río Las Ceibas por un tiempo prudencial. Hasta el momento, y después de un año, el tiempo solicitado no ha llegado a su culminación, contaminando en la actualidad al río.
Después de la visita a Granjas de San Bernardo, nos dirigimos a Las Moyas de El Ariete y/o El Balso. Antes de entrar en este lugar le preguntamos a un vecino si era pertinente nuestra llegada, dado a que allí llegan los consumidores de drogas a desconectarse del mundo, y posiblemente fuésemos víctimas de un hurto. En este lugar, en una de las pocetas, encontramos una mojarra conocida popularmente como picuda o mojarra negra, lo cual confirma la existencia de vida acuática en esta fuente hídrica. La vegetación del lugar, compuesta por árboles de Balso y Yarumos, es espesa y está conformada por una gran diversidad de especies naturales de gran importancia para la interacción entre los demás ecosistemas del sector.
En este lugar concluyó la travesía por las fuentes hídricas de la comuna 10. Cabe resaltar que en una reunión adelantada el 12 de abril en instalaciones de la CAM, el grupo de ingenieros y administración pública, trataron el tema de la preservación de Las Ceibas de la parte alta, zona de preservación natural. Pero desconocen las problemáticas ambientales existentes en Ceibas abajo, zona del casco urbano de la ciudad.